Celebremos a las madres que educan en la responsabilidad, el esfuerzo, la tolerancia y la generosidad.

«A las madres que empoderan, que dan alas y derriban muros.A las madres que no aceptan un NO por respuesta.A las madres que dan herramientas y enseñan a tomar decisiones.A las madres que perdonan y escriben páginas en blanco.A las madres que viajan, sueñan e imaginan.A las madres que retan, que invitan a probar y que recogen al caer.A las madres que cuidan, quieren y respetan. Y no esperan nada a cambio.A las madres que se equivocan e intentan rectificar. Celebremos a las supermujeres, a las guerreras, a las madres/padres, madres primerizas, madres solteras, futuras madres, madres que lo son por tercera y cuarta vez… a todas las madres del mundo, las “para siempre” de nuestras vidas».
Por Teresa Helbig

Por este motivo, queremos compartir contigo la carta tan especial que Teresa le escribe a su hija Zinash que reivindica y pone en valor una solemne y rotunda forma de educar, de vivir y respirar que pasa de generación en generación empoderando a las futuras líderes del mañana.

Teresa Helbig con su hija.

«Querida Petite Helbig; Hace 25 años, mi madre y yo hicimos un vestido que revolucionó mi vida (y quiero pensar que la de muchas personas), creamos “Teresa Helbig”, y hemos ayudado, con nuestro grano de arena, a que las mujeres más increíbles se sientan más poderosas, distinguidas y especiales, que la artesanía y el savoir faire sean una herencia que pase de generación en generación y que el mundo sea un poco más sostenible, honesto y bonito. Pero hoy no estamos aquí para hablar de mi, sino de ti. Quiero decirte que tendrás el poder de derribar muros y construir puentes, edificarás ciudades enteras y levantarás los edificios más altos del mundo.Tendrás el entusiasmo y la pasión de ser quien quieras ser y explotará dentro de ti como un cohete.Tendrás la magia de construir relatos e historias y le darás el salto a Louise Glück por ganar el premio Nobel de Literatura por tu imaginación narrativa sin tabúes.Tendrás la valentía de querer, sin prejuicios, de forma desmesurada y por encima de todo.Tendrás la solidez y la empatía para solventar conflictos internacionales como la lucha racial, y Rosa Parks sonreirá desde el cielo.

Encontrarás la cura definitiva al VIH. Conseguirás que el momento en que las mujeres no teníamos el mismo poder que los hombres sea una pesadilla del pasado que nadie recuerda y con la que nadie se siente identificada. Tendrás la humanidad para cimentar las bases de una nueva realidad, mucho más transparente, responsable e integradora. Ganarás Grand Slams, alzarás copas y tomarás la pista de un GP. Redefinirás el concepto de realidad virtual. Tendrás el coraje de explorar el espacio desde lugares que aún no sabemos que existen.Y, como Kathy Sullivan, descenderás hasta profundidades aún por recorrer.Mi gran sueño, empezó con mi primer Helbig. El futuro de todos empieza con tu Petite Helbig. Bienvenida a esta nueva era».