El verano es una época donde prevalece la diversión y la despreocupación sobre todas las cosas. Sentirnos bien en nuestra propia piel, vestirnos como queramos y olvidarnos de los prejuicios son esenciales para disfrutar de verdad. Puede parecer una tarea complicada cuando nuestro propio bikini no nos queda bien y no nos aporta seguridad. ¿Estamos usando la talla equivocada? Desde la firma especializada laCorsetera, acostumbrados a resolver este tipo de dudas, nos indican las diferentes situaciones en las que nos podemos encontrar para ofrecernos la solución definitiva.

El pecho está muy bajo y la parte de arriba muy plana y vacía

Si esto ocurre, significa que te queda grande. Visualmente, esta situación provoca un desagradable efecto de pecho caído porque no se llena completamente la zona superior, dando la sensación de que está vacía. Para evitarlo, “nosotras somos partidarias de dar siempre un bikini que quede justo, pues después de tres o cuatro baños, la licra se expande y se ajusta mejor al pecho”, explica Piedad, fundadora de laCorsetera.

El bikini sin tirantes se ve ahuecado

Con los sujetadores de bikini de estilo bandeau debemos tener cuidado, pues al carecer de tirantes necesita un diseño adecuado que se ajuste muy bien a nuestro pecho y que evite que se caiga. Te puedes encontrar con un efecto de pecho caído o, si te queda grande, además, un efecto ahuecado muy poco favorecedor, haciendo que sobresalgan también los bordes.

Otro factor para que este tipo de bikinis queden mal es el hecho de que muy pocas mujeres se lo saben colocar bien, algo que Piedad ha podido comprobar en primera persona en los probadores. Para ajustarlo bien, nos da tres premisas clave a tener en cuenta:

Subir los tirantes muy cerca de la axila, tanto por los lados como por detrás
Recoge todo el pecho dentro de la copa con el dedo índice y angular
Una vez colocado, podrás bajar las tiras de detrás a tu gusto, no antes.

Te metes en el agua y la parte de arriba se te sube

Si saltas a la piscina, viene una ola o sales del agua y el bikini no se mantiene donde tiene que estar, la talla es más grande de lo que debería ser. Esto también puede ocurrir cuando jugamos a algún juego, como las palas, y hay demasiado movimiento de pecho, cuando debería estar bien sujeto. Es posible, además, que el error no esté en la talla únicamente, sino también en el tipo de bikini, porque el elegido no aporta la sujeción adecuada para nuestro tipo de pecho.

El pecho se ve más grande y ancho de lo que es

Un claro signo de que el bikini es más grande de lo normal es la forma irreal que crea al separar demasiado el pecho y crear un efecto visual central demasiado vacío. Parece que el pecho es mayor y mucho más ancho en la zona de las axilas. ¡Error! Opta por una talla menos que se adapte a la forma real de tu busto.

El bikini crea un doble corte en la axila

Cuando contamos con un pecho de talla grande y utilizamos una talla demasiado pequeña, esto se deja ver en el feo corte que se genera en la zona de la axila, dejando ver dos especies de bolas de la glándula mamaria. Eso significa que queda demasiado ajustado. Si el contorno está bien, entonces el problema se encuentra en la copa.

El bikini te deja el contorno marcado cuando te lo quitas

Si, al deshacernos del bikini, nos encontramos con la marca de éste por el contorno, no estás utilizando la talla adecuada y necesitarás una más. Si la marca es en el hombro, el problema es del tipo de bikini y no de la talla, pues la falta de sujeción en el pecho provoca que el tirante esté demasiado apretado, intentando subir el pecho sin éxito.

El contorno, por la espalda, se sube demasiado

Sin duda alguna, otro síntoma de que no estás utilizando la talla correcta es el contorno demasiado subido por la espalda. Esto genera un efecto de pecho caído y, además, ocasiona mucha incomodidad y problemas de salud relacionadas con el esqueleto. Este error suele ocurrir en mujeres con mucho pecho y poco contorno que adquieren un bikini sin probarlo con anterioridad. No caigas en la trampa y pruébatelo siempre. Las tiras del contorno por la espalda deben quedar a la altura del pecho, ni más arriba ni más abajo. Y, por supuesto, el pecho bien sujeto.

¿Cómo calcular tu talla de bikini?

Para encontrar nuestra talla de bikini perfecta, debemos atender siempre al tallaje de nuestro sujetador habitual. Aquí el truco consiste en bajar una talla de copa para que se ajuste como un guante, el pecho quede bien sujeto y recogido y, para las tallas más grandes, disimule más. Así pues, si normalmente contamos con una 100F de sujetador, apostaremos por una 100E.

No obstante, si notas que el contorno se encuentra algo flojo pero la copa está bien, acude a la calculadora de laCorsetera. Encontrarás recomendaciones que te permitirán ajustarte perfectamente a tu contorno y a tu pecho. Y, si aún así sigues con dudas, sus asesoras expertas darán con la solución definitiva.

Este verano darás (por fin) con el bikini que te sentará como un guante. ¡Lo notarás y lo notarán!

Foto Fuente: @kimkardashian